Ésta es una canción dual, es decir, se puede interpretar de dos formas: por un lado se refiere al diablo que viene a cobrarle su vida a un desgraciado que se la ofreció a cambio del poder. Por otro, se puede interpretar como un recaudador de impuestos que viene a cobrar para que después el sistema ofrezca sus "servicios".

"La deuda".

¿Te olvidas, de tu deuda, es que no sabes que he venido a cobrar?
Mi tributo, lo pactado, es hora de empezar a pagar.

Quiero sangre, me encanta, es mi más dulce manjar.
Hace tiempo que esperaba, menos mal que tengo paciencia.

Qué gran sensación, paladear este néctar,
Es para enloquecer, es para disfrutar.

Levanta esa copa, sonríe, vamos a brindar.
Soy buen chico, cuando quiero, ¿no lo percibes en mi tierna mirada?.

Dámelo todo, ya has disfrutado, ahora déjame gozar.
Despójate de lo más preciado, lo voy a devorar.

Bebe y sonríe, vamos a viajar,
hacia un trono dorado, desde el que puedes gobernar.